sábado, 14 de octubre de 2017

Un cuestionable estudio afirma que Pokémon provocaría homosexualidad




No es ninguna novedad que Pokémon, una de las más populares franquicias de los últimos años, sea vinculada una y otra vez por personalidades religiosas con el satanismo, la homosexualidad o las tendencias suicidas... pero ahora, habría un "estudio" que sostiene tal afirmación.


Antes que nada, vale decir que este es un artículo informativo que no intenta burlarse de la religión ni sus creencias... pero es que considerar un anime ovideojuego como generador de identidad sexual, necesita tener mejores y más fuertes argumentos que lo avalen.
El "estudio" que lo demuestra

¿A qué podemos llamarle "estudio"? Seguramente, tenemos de ello un concepto muy diferente al de Creflo Dollar (y no haremos chistes sobre su apellido, o las tareas recaudatorias asociadas a la religión hoy en día).

Él es un pastor que, desde hace muchos años, realiza varias tareas para promover su pensamiento, y que ahora ha llegado a una impactante conclusión: haber crecido en los años 90 bajo la influencia de Pokémon en su época de auge, es uno de los principales motivos de la homosexualidad.




Uno de los motivos por lo que concluye tal cosa, es que el anime "está dirigido a adolescentes pervertidos", y que "es clara la relación platónica entre Ash, el protagonista, y su compañero Brock". Y será que con los años no recordamos bien las primeras temporadas, pero tendría más sentido si cambiáramos el nombre Brock por Misty, con quien sí existía cierta tensión romántica, en una relación heterosexual.

Por otro lado, tampoco podemos olvidarnos las decenas de intentos fallidos entre Brock y cada chica que se cruzaba en su camino, y que estaba particularmente enamorado de las enfermeras Joy, y las oficiales Jenny.


Si la preferencia sexual de Ash (que a todo esto, técnicamente es un niño de 10 años) es homosexual o no, poco afecta al desarrollo de la historia; pero claramente no existían referencias directas sobre su orientación, y mucho menos sería la serie una excusa para generar o promover la homosexualidad (como sí sucede en otros géneros, como el yaoi o el yuri)

Además, el ministro religioso afirma que varios pokémon tienen mensajes subliminales en su nombre o su diseño, y cita como ejemplos a Bulbasaur (que haría referencia al órgano genital femenino, con una deformación del nombre que genere aversión a las mujeres), Charmander (cuya cola está constantemente en llamas, en una metáfora sexual explícita), Weedle o Caterpie (por su forma fálica), e incluso define a Mew como "la representación perfecta del tercer sexo".




Nuevamente, confirmamos que aún en 2015, muchos todavía hablan de pokémon únicamente por sus primeras temporadas. Y debemos darle el mérito correspondiente al señor Dollar, por evitar buscar referencias en las sagas más olvidables de las últimas temporadas.


Como parte de un estudio paralelo, el equipo de La Historieta ha confirmado que ninguno de quienes hemos disfrutado el anime Pokémon cuando niños ha visto su sexualidad modificada. Aunque mejor no hablamos de los ritos satánicos que practicamos con cartas de Yu-Gi-Oh! (¿o era "pókiman"?) entre artículo y artículo...


¿Realmente crees en estas teorías? ¿Has visto modificada tu orientación sexual, religión o creencias, a causa de Pokémon o cualquier otro producto de los videojuegos, anime, manga o cómics? Nos encantaría leer tu opinión al respecto.

Post Relacionados

No hay comentarios:

Publicar un comentario